Ir al contenido principal

Moldear y tallar la forma: Kulttuuritalo. La Casa de la Cultura de Alvar Aalto de Helsinki 1954-58 - Aurora Fernández

 "La investigación arquitectónica puede ser más metódica que en tiempos precedentes, pero su esencia nunca puede ser puramente analítica. La investigación arquitectónica siempre será una cuestión de arte e instinto." Alvar Aalto.

 La Casa de la Cultura fue encargada a Alvar Aalto en el año 1944 por las asociaciones comunales de Helsinki, y no dispone de un solar para el edificio hasta el año 1951. La construcción comenzó en el año 1954 y se terminó en el 1958, bajo muchas dificultades económicas. Muchos afiliados al partido comunista trabajaron de manera solidaria como obreros en su consstrucción. Esto ayudó al ascenso del partido comunista en Finlandia.

 El solar se encontraba en un barrio de la parte norte de Helsinki, una calle con bastante tránsito. La zona estaba dominada por unos depósitos de agua elevados sobre una loma de piedra.

 El edificio esta dividido en tres zonas, con diferentes funciones. La primera, la zona del auditorio, hacia el oeste, comprende la gran sala para conciertos, la sala de congresos y salas de ensayo, el cine con entrada independiente, el restaurante, el garaje y espacios de mantenimiento. La segunda, la zona central, se sitúan la entrada principal al edificio, salas de conferencias, la biblioteca, el archivo, aulas, la cocina del restaurante, el gimnasio y una zona de vestuario y baños. Y la tercera, la zona este, contiene un programa de oficinas desarrollada en 5 plantas y dos apartamentos.

 Las tres áreas del edificio se disponen en forma de "u" abriéndose hacia el sur y la calle. En esta fachada a la calle, una marquesina de 60 metros de largo une todo el conjunto. El espacio vacío entre las  piezas funciona como un patio de relación del conjunto y lugar de reunión. Se ajardina y se coloca una lámina de agua coronada por una escultura de una mano abierta en conmemoración de los obreros que habían trabajado en el centro cultural.

 El edificio combina dos geometrías, una ortogonal resultado de un prisma racional, para las oficinas y la entrada principal rematada con fachadas de piezas patinadas de cobre, cristal y base de granito. Y otra geometría sinuosa y curva de la sala de conciertos que se reviste con una piel cerámica.

 El centro cultural se resuelve con una estructura portante de hormigón en las que las fachadas se revisten de una manera libre. Y es en ese cerramiento, donde Aalto introduce su pensamiento sistemático de proporciones y análisis de geometría inherente al material, asociado a las formas del conjunto de edificios. Para él, la arquitectura no es una fusión indivisible entre estructura y espacio en los términos de Colin Rowe sino una manera de cómo se puede matizar, escalar, un espacio a través de los materiales y la tecnología aplicada a ellos a través de "humanizar" su función.

 Por ello,  su arquitectura está siempre en constante investigación y al mismo tiempo aparecen muchos conceptos asociados a los propios materiales como textura, repetición, estandarización, erosión, mutación, motivo, relieve y collage. Estos conceptos se relacionan con los procesos de moldear el material y el tallar la forma y la geometría aplicada a su trabazón y unión.

 En la piel del edificio se mezclan dos materiales que se usan de manera distinta a la tradicional. El ladrillo por su forma ortogonal y prismática se ha usado tradicionalmente, para formar paredes y volúmenes propios que emergen de su forma plana y maneras de unión. El cobre se ha usado en planchas laminadas muy finas que permiten gracias a su maleabilidad su adaptación por doblado o plegado a formas sinuosas, puntiagudas y curvas.

 La confrontación de estas dos formas -materiales- obliga a Aalto a trabajar con dos dimensiones de gran interés para resolver la piel de este edificio: el volumen moderno, modular y racional se realiza con el uso de piezas repetitivas de cobre patinado a modo de fachada ventilada y vidrio organizando un ritmo y proporciones, y el volumen sinuoso y orgánico que se resuelve con la pared cerámica de ladrillos.

 Estas dos geometrías, no propias de los materiales usados, han desencadenados una investigación del material y su aplicación a la fachada y cubierta en su forma, tamaño y puesta en obra. El diseño del ladrillo y la plancha de cobre preceden del estudio de Aalto y de la colaboración con empresas de nacionales de extracción del material y su fabricación. Se convirtieron las dos en patentes comerciales. Sin embargo, este ladrillo cerámico no lo volvió a usar.

 Para él, el ladrillo era un material tradicional con muchas posibilidades:

"Una pared de ladrillo ordinario es un objeto aparentemente primitivo. Si se hace correctamente, los materiales obtenidos de la propia tierra de refinación, de utilizarlos en la forma correcta, y su vinculación a la totalidad correctamente, el ladrillo, sin embargo, constituye la unidad básica de los monumentos más preciosos construidos por la humanidad, de manera similar, el ladrillo es el elemento básico de la comodidad social en un entorno de entrega".

 Aalto ya había utilizado la cerámico en su estancia en Estados Unidos (1946-49), en el edificio Baker de dormitorios para el MIT de Boston, dibujando unas curvas sinuosas desplegadas hacia el río. La forma sinuosa del edificio atendía a la orientación sur de todas las habitaciones que miraban hacia el río mientras que hacia el norte se colocaban los corredores y comunicaciones. En este edificio había usado un ladrillo con diferentes facetados y distintos grados de cocción colocados en las caras externas de las paredes oblicuas. Eran de tamaños irregulares y se desplazaban cuidadosamente entre sí mediante el uso del mortero para que cada uno tuviese diferentes sombras y maticces a la luz del sol.

 En zonas rectas algunos de los ladrillos dejaban ver sus irregularidades a modo de relieves, para resaltar su unicidad dejando ver un bloque no por su proceso industrializado sino por su producción artesanal.

 El demuestra mucho interés por el relieve en las superficies exteriores de la Casa de la Cultura, y utiliza elementos repetitivos como son la unidad de ladrillo, la unidad de plancha de cobre patinada y la unidad de cristal para su análisis. Este relieve le permite escalar los volúmenes, dar continuidad al conjunto de edificios y matizar el volumen prismático de las oficinas y viviendas realizado el acabado de cobre y cristal y el sinuoso enteramente cerámico.

 La unidad del ladrillo y su trabazón repetitiva moldea una forma sinuosa que talla la piel del edificio de la sala de conciertos y se pone en contrapunto con el sólido regular y prismático del bloque de oficinas para establecer un nuevo orden del conjunto de edificios.

 En el desarrollo del diseño del ladrillo, se propone una pauta para utilizarlo de manera flexible en una pared curva. Durante el proceso de obtención de la forma y del tamaño final, se hicieron varias pruebas que lo fueron reduciendo de tamaño hasta adaptarlo tanto a partes convexas como a partes cóncavas y peso equilibrado. Con el diseño final se hizo una prueba de cocción. La forma final del ladrillo es un trapecio con un borde recto y otro curvo que resultó excelente para la construcción de superficies curvas y contra-curvas como exigía la Casa de Cultura. Le permitía la continuidad de la pared y el cambio de la curvatura.

 Inicialmente el ladrillo era macizo interiormente pero al cocerlo la cocción no era lo suficientemente uniforme por lo que se rompía.

 Posteriormente, en otra prueba de laboratorio lo perforó interiormente para aumentar su durabilidad. Esta perforación le permitía además de una cocción más uniforme reducía las tensiones por los cambios de temperatura y se mejoraba su colocación con un refuerzo vertical de acero. Aalto utilizó este refuerzo vertical para la trabazón de la fábrica cerámica exterior. La impecabilidad de las paredes y sus juntas es extremadamente fina y clara.

 El ladrillo se coloca sin yuxtaponer y se apila verticalmente uno sobre otro hasta conseguir la altura total del muro que se resalta. Cada ladrillo es una pieza material única y cada pared es el resultado de la composición con una textura táctil que se traba por adición de piezas; moldea la superficie y talla desde la unidad cerámica.

 La escala de la fachada tiene su origen en la unidad del material que por adición de piezas en vertical y girando en la directriz curva alcanza la escala de lo público. Las juntas dentadas y la forma de la unidad ladrillo crean una superficie continua, matizada por la luz y las visiones continuas alredededor del edificio. Al mismo tiempo, la piel ciega de ladrillo consigue diferentes escalas por los gestos para lo público y tallado por la unión de unidades de ladrillos de dimensión doméstica que resaltan sus siluetas respecto al entorno próximo mediante la trabazón entre ellos. El relieve del muro está integrado en la propia envolvente curva que es el soporte que los enmarca. Cada parte que constituye la envolvente representa una secuencia narrativa matizada por la luz y sombra y las visiones aisladas desarrolladas a su alrededor. El ladrillo no es la expresión de lo que quiere ser como había dicho Louis Kahn sino que reflexionaba matices sobre la arquitectura:

 "El logro de una unidad estándar con la que una forma curvada deseada puede alcanzarse en una pared sin cambiar el estándar que las unen".

 La unidad de ladrillo se ha convertido en materia que se puede sentir y tocar y ocupa un lugar en el espacio de esa forma curva continua y colabora al recorrido del espectador para sentirla diversa en la envolvente definida.

 El cobre tampoco era un material nuevo en la arquitectura aaltiana. Lo había utilizado en muchas cubiertas de sus edificios. Era un material de uso tradicional en Finlandia, extraído en la zona de Carelia.

 En 1949 se inventa en Finlandia una forma muy ecológica de extracción sin disminución de material en los hornos de fusión de Outokumpu, que Aalto aprovecha para reinvidicar la idea "nacional" de la materialidad de sus obras.

 El empieza a investigar en los procesos de moldeo de cobre para la producción de planchas estandarizadas en la construcción, utilizadas como un motivo repetitivo, de revestimiento dando textura y escala al muro racional y prismático del edificio de oficinas.

 Aalto toma del relieve que es la técnica escultórica en la que las formas modeladas o talladas se resaltan respecto a un entorno plano, para desarrollar la producción estandarizada de las planchas de cobre. Para ello, definirá los límites del soporte sobre el que se van a colocar las piezas bajo la idea de homogenización de un motivo del relieve para evocar un friso.

 Los relieves de cobre están integrados en una franja del muro cortina, levantado sobre un zócalo de piedra.

 Las planchas de cobre grecadas de color verdeazulado con un ritmo vertical se colocan definiendo una alternancia horizontal entre la fachada de vidrio y la de cobre.

 Cada plancha ha perdido su carácter de unicidad formando una trabazón continua en sucesión de planos horizontales intercalados con el vidrio que definen un volumen nítido prismático y, dando al edificio de oficinas una escala doméstica por la utilización de los ritmos verticales y horizontales pautados, por los tamaños de las carpinterías y la yuxtraposición de materiales.

 El aplacado de cobre patinado es una puesta en valor de los sistemas industrializados que se utilizan en el recubrimiento de la piel de edificio generando un motivo repetitivo que procede del arte ornamental y decorativo. Estas planchas forman patrones de unas dimensioones determinadas, como en las artes textiles, que imprimen sobre el prisma racional una textura con relieve continuo suave y terso, perdiéndose la medida de cada plancha y dando valor al carácter de friso y del soporte. Este friso de lectura continua está en dialéctica con las aristas que limitan el volumen. Se expresa más como piel continua que como conjunto de partes (planchas) que conforman esa piel. Los procesos estandarizados e industrializados trabajan sobre la textura de la piel como conjunto no desde el propio elemento, como lo había expresado en este edificio de oficinas viene fijada por la altura de las plantas y por las pautas de las carpinterías de madera de las ventanas.

 Los materiales que conforman la piel en vez de organizar composiciones abstractas ordenan y matizan el edificio o conjunto de edificios conduciendo a diferentes imaginerías que son resultado del uso de la geometría organizadora del sistema de material empleado.

 La cubierta del conjunto de edificios también se remata con superficies de cobre lisas en tono verdeazulado claro.

 La arquitectura de Aalto en el centro cultural de Helsinki es una demostración de cómo se puede extraer de los materiales tradicionales y sus detalles una lección sobre las apreciaciones táctiles y sensoriales que conforman la piel de la arquitectura. Y como esta materailidad se adapta a las técnicas, condiciones climáticas...alude a una representación abstracta de los paisajes nórdicos y los rasgos estéticos autonómicos. Estos materiales extraídos y elaborados en Finlandia son la muestra de su tecnología, se ponen al servicio de las formas del conjunto de edificios. Se ofrecen como un collage que entrelazan la curva y línea recta que controlan y matizan la diversidad del espacio para proponer una experiencia "humanizada" que alcanza a todo el objeto arquitectónico que se propone para la ciudad de Helsinki.

 "La aparición de la tecnología y la entrada en el arte de las cosas pulimentadas, fabricadas racionalmente con cálculos y tiralíneas y compases, que me las asimila a los objetos industrializados utilitarios. Me falta la huella de la mano del artista, el "milagro" del tacto que sensibiliza la materia." Antoni Tapies.

*Este escrito fue extraido del libro Métodos e instrumentos de la arquitectura moderna. Una bibliografía temática (2016) compilado por Antón Capitel. 




Comentarios

Entradas populares de este blog

Cronocaos y el agujero negro, Bienales: la importancia del pasado - Verónica Rosero

 Bienales: la importancia del pasado  "Empecemos por el principio", dice Hans Ulrich Obrist a Rem Koolhaas, intentando indagar cuáles fueron los inicios de su interés por la conservación y su camino hacia "Cronocaos". Una serie de pequeñas televisiones colocadas a lo largo del Palazzo delle Esposizioni mostraban entrevistas a varios de los participantes de la Bienal. Las entrevistas estaban a cargo de Hans Ulrich Obrist. Entre ellas, una entrevista a Rem Koolhaas con motivo del comisariado de "Cronocaos".  En la entrevista por Ulrich Obrist, Rem Koolhaas empieza por esbozar lo que antecedió a Cronocaos. El Parlamento Holandés fue el primer proyecto en el que OMA tomó en consideración la cuestión de la conservación. Allí afloró el interés por trabajar con la historia, con el pasado. Más tarde llegó el proyecto para la Koepel Panopticon Prision , un edificio del siglo XIX que debía ser equipado para al menos 50 años más para encarnar las actuales perspectiva...

La luz que construye el tiempo y el espacio. Sobre la arquitectura de Adolf Appia - Alberto Campo Baeza

 Suena en el aire de la perfectísima voz de la Callas: Ho visto il figlio sul materno seu, interpretando a Kundry en la grabación de un Parsifal sublime que la soprano interpretaba al comienzo de su carrera en los 50. No puede ser fondo más adecuado para escribir sobre Adolf Appia, que a sus veinte años se conmueve con la representación del Parsifal que ve precisamente en Bayreuth y para la que después dibuja unos preciosos carboncillos.  Podría ser un atrevimiento para un arquitecto escribir sobre el escenógrafo, pero ya decía Le Corbusier que la Arquitectura es "el juego magnífico de los volúmenes bajo la luz". Y ¿qué son sino eso lo que obstinadamente y con una mente preclara propuso Appia durante toda su vida? Arquitecturas despojadas, espacios esenciales animados por la luz: espacios fuera del tiempo.  Tan esenciales tan despojados, tan casi nada son que se diría que asemejan ruinas. Como bien apunta el profesor Martinez Roger al describir las estrategias de Appia: ...

Cronocaos y el agujero negro, Crono-caos - Verónica Rosero

Crono-caos Así como varios arquitectos en el siglo XX presentaron un interés por el espacio-tiempo y las teorías de la física moderna, actualmente Rem Koolhaas en su planteamiento para Cronocaos tiene una especial consideración por la terminología astrofisica al mencionar a los agujeros negros como metáfora para entender actitudes, comportamientos y tendencias con respecto a la arquitectura moderna y la ciudad. También palabras como el tiempo, el espacio, el caos, son parte de esa terminología, que desde sus nociones más esenciales, son utilizadas como herramienta para el entendimiento de la contemporaneidad arquitectónica y urbana. El tiempo juega un papel importante al definir Cronocaos: la retrospección y la prospección definen una serie de instancias del estado del objeto arquitectónico. Mientras tanto, el espacio está sujeto a un desorden producido por alteraciones en dicho objeto determinadas por juicios de valor que modifican la cronología.  Para una mejor comprensión de aqu...